La Finca Tracey es una villa muy amplia situada en el campo con unos maravillosos jardines y una piscina muy atractiva. La villa se encuentra en un terreno de 8963m2 totalmente vallado al que se accede a través de imponentes puertas que conducen a jardines muy bien cuidados que no requieren mucho mantenimiento. En ellos nos encontramos con olivos centenarios, parterres elevados de flores y arbustos ornamentales. En la zona de la piscina hay un pequeño bar cerrado y un espacio para comer al aire libre con una barbacoa hecha a medida que presenta tres conductos separados para barbacoa, pizza y horno. Desde este agradable espacio recreativo, a lo largo de una terraza de piedras, se llega a la casa que te sorprenderá por su espacio.
Se accede por un invernadero que conduce a una sala de estar de planta abierta con cocina. Desde esta área de estar central y en la planta baja, hay un dormitorio con baño, un espacio actualmente reservado al trabajo artesanal y un comedor formal. Todos estos espacios podrían convertirse fácilmente en dormitorios. Subiendo las escaleras desde la planta baja, hay dos habitaciones con baños en suite y un dormitorio estudio con su propio baño, área de estar y acceso a una gran terraza con excelentes vistas al mar. En general, el espacio interior es sorprendentemente generoso, con más de 140 m2, y ciertamente se presta a todo tipo de adaptaciones.
En el terreno, hay una gran área de almacenamiento de 30m2, un garaje abierto con espacio para dos vehículos. Hay también un cobertizo para la leña y un maravilloso espacio preparado para huerto con bancales elevados para que puedas plantar y cosechar todos los productos naturales para la cocina durante todo el año. Esto se debe a que la propiedad tiene acceso a un pozo y está conectada a la red électrica. La otra buena noticia es que aunque la Finca Tracey sea una propiedad rural rodeada de naturaleza, la propiedad no está muy lejos de la civilización, a solo 10 minutos en coche de L'Ampolla con un buen acceso. Y para cualquiera que tenga ganas de hacer un poco de cultivo de olivos, los árboles producen 2000 kilos de aceitunas, lo que equivale a 200 litros de aceite de oliva, lo que significa que la finca es generosa en tamaño pero sigue siendo menos de una hectárea de tierra, lo que hace que su mantenimiento sea una propuesta muy razonable. Y cosechar tus propias aceitunas te brinda una conexión especial con la madre tierra y tener tu propio aceite en la mesa es motivo de orgullo.
En resumen es una finca que requiere algunas mejoras y visión, pero es un lienzo en blanco que ofrece infinitas posibilidades. Así que si estás buscando un hogar cómodo, bien diseñado y adaptable que esté listo para vivir, cerca del pueblo, en un terreno con gran potencial y vistas al mar desde el segundo piso, tal vez no necesites buscar más.
