Esta impresionante casa modernista de principios del S. XX está situada en pleno centro de Palafrugell y, dada su proximidad a algunas de las mejores playas de la Costa Brava, es un inmueble ideal tanto como primera o segunda residencia, o incluso para habilitar un pequeño hotel con encanto.
Se trata de una propiedad única y muy exclusiva que destaca por sus características arquitectónicas que reflejan muchos elementos del modernismo catalán, tanto en el exterior de la villa (fachada decorada, algunos mosaico de color, terraza con balaustradas en piedra con formas de espiral, ...), como en su interior, donde destacan la espectacular escalera con barandilla de hierro forjado y pasamanos de madera, los altos techos con artesonados y molduras, así como la espléndida puerta con vidriera multicolor y motivos florales que da paso al comedor.
La propiedad se ubica en una parcela de 440 m2, en una zona tranquila de la ciudad, a solo unos pocos minutos a pie del centro de Palafrugell y de su zona comercial.
La finca dispone de un agradable jardín con flores y vegetación bien consolidada e incluso con un pequeño huerto urbano. También cuenta con un amplio pabellón exterior con barbacoa y mesa comedor, ideal para disfrutar de comidas y ratos de ocio con la familia y amigos.
DISTRIBUCIÓN
La casa tiene unos 400 m2 de superficie, distribuidos en 3 plantas de la siguiente forma:
La planta baja (175 m2) consta de:
Entrada principal, con hall recibidor
Distribuidor donde nace la magnífica escalera que nos conduce a las plantas superiores
Salón de 33 m2
Impresionante comedor (32 m2) con chimenea, decorado al estilo de la época
Entrada de servicio, con recibidor
Cocina con salida al pabellón exterior y despensa independiente
Pabellón exterior con chimenea
Aseo
La primera y segunda planta, cada una de 115 m2, tienen ambas la misma distribución que consiste en:
Habitación principal de unos 30 m2, la de la 1ª planta con salida a una amplia terraza
Dos habitaciones dobles
Un cuarto de baño con bañera
La casa, que por sus características y decoración, es casi un museo, es perfectamente habitable, aunque requiere de algunas actualizaciones.
Cuenta con radiadores de calefacción y ventanas de madera con porticones y rejas.
Este es un inmueble muy especial que, convenientemente actualizado, se trasformará en una finca de gran valor por su singularidad y personalidad.
