Situada frente al mar y con vistas espectaculares al Mediterráneo, esta villa única está perfectamente diseñada para disfrutar de la vida dentro y fuera de la casa. Se encuentra a 40 kilómetros al norte de Barcelona, en el Maresme, conocido por sus playas, clubs náuticos, campos de golf, restaurantes y exclusivas urbanizaciones.
Esta propiedad es una maravilla arquitectónica, distribuida en cinco plantas, cada una con vistas espectaculares y acceso directo a las distintas terrazas, zonas ajardinadas y piscina. Un ascensor de servicio nos lleva desde el garaje hasta la sala principal y la cocina. Cada una de las dos plantas inferiores dispone de una suite con acceso directo a la piscina y al jardín.
La planta intermedia es un espacio abierto con sala de estar, comedor y cocina con acceso a un gran patio con una cocina exterior con parrilla incorporada. La sala de estar tiene ventanas correderas completas que mezclan el interior y el exterior en un solo ambiente, así como una chimenea de leña que flota en el aire. La cocina está totalmente equipada al más alto nivel con una estufa Gaggenau, un refrigerador Smeg y una cafetera Miele incorporada. También cuenta con un aseo para invitados, un trastero y un lavadero.
La suite principal con vestidor se encuentra en la cuarta planta y tiene acceso directo a una gran terraza. También disfruta de una estufa de leña perfecta para las noches más frías.
Arriba, a nivel de la calle, hay un garaje para dos coches con puerta automática, una sala polivalente utilizada actualmente como oficina y una habitación adicional. Hermosas escaleras paisajísticas conducen de arriba a abajo de la propiedad y proporcionan acceso a cada nivel, incluyendo la sala de máquinas con descalcificador, calderas eléctricas y de gas, y sistemas preparados para la generación de energía solar.
El bonito jardín mediterráneo está lleno de flores de colores y árboles frutales, como almendros, naranjos, limoneros, higueras y albaricoques. Las terrazas están diseñadas para recoger el agua de la lluvia, que proporciona un riego automático para el jardín.
En la costa norte de Barcelona y específicamente en el Maresme encontrará diversos pueblos pequeños y urbanizaciones que se extienden a lo largo de la costa desde Mongat hasta tocar Blanes, donde comienza la Costa Brava.
Esta zona es ideal para aquellos que quieren disfrutar de un hogar cerca tanto de la naturaleza montañosa como del Mediterráneo, y que al mismo tiempo no quieren renunciar a estar a dos pasos del corazón de Barcelona. Gracias a sus excelentes conexiones con Barcelona, tanto en tren como en coche, muchas personas viajan a diario desde el Maresme hasta Barcelona y viceversa. Esto quiere decir que en los pueblos que rodean el Maresme hay vida durante todo el año. De hecho, a pesar de que durante los meses de verano hay mucho turismo, no existe una verdadera temporada baja y por lo tanto los restaurantes y las tiendas mantienen los mismos horarios a lo largo de todo el año.
En esta zona puede practicar todo tipo de actividades, desde montar a caballo y hacer senderismo en las preciosas montañas que enmarcan el Maresme, hasta navegar y bucear en el Mediterráneo, chapoteando a lo largo de la costa. Además, la franja de tierra entre la montaña y el mar cuenta con unos increíbles campos de golf y clubes de tenis. Las kilométricas playas de agua cristalina de la zona del Maresme también atraen a muchos habitantes de la ciudad durante los fines de semana.
