Muy cerca de la playa se encuentra esta Masía del s.XIX con aprox 8 hectáreas de terreno en la población costera de Sant Pol de Mar, en la costa mediterránea al norte de Barcelona.
Consta de una vivienda principal, piscina con comedor de verano y baño, construcción anexa parcialmente reformada y licencia turística para el alquiler vacacional de toda la finca.
El terreno tiene zonas ajardinadas, huerto, árboles frutales, olivos, bosque y acceso a una zona que podría habilitarse como parking.
La masía de 540m2 se distribuye en tres plantas:
P1: entrada principal a través de una terraza cubierta que comunica con el jardín. Recibidor, salón con chimenea, comedor con chimenea, cuatro dormitorios, dos baños completos y cocina con zona de servicio con baño y acceso al patio trasero con barbacoa. En esta planta hay calefacción por radiadores.
P2: salón con chimenea y tres dormitorios con dos baños. Se podría instalar calefacción.
P0: zona de bodega que da acceso a un apartamento con salón con chimenea, comedor, cocina, dos dormitorios. Tiene entrada independiente por el jardín y contiguo hay un garaje amplio que actualmente se utiliza como trastero y que conduce a la zona de caldera y taller.
En la parte trasera de la masía hay una construcción anexa de aprox. 140m2 que podría reformarse como casa de invitados o salas multiusos. La instalación eléctrica ha sido revisada recientemente, tiene fibra óptica internet y agua de la red.
Su gran potencial permite que con una renovación de algunos espacios se pueda disfrutar de una preciosa finca rodeada de naturaleza, a escasos minutos de la playa y del encantador pueblo de Sant Pol de Mar, entre Barcelona y la Costa Brava y bien conectada con Andorra, Francia...
Sant Pol de Mar es una pequeña localidad de ensueño entre los pueblos costeros del Maresme, localizada a menos de una hora al norte de Barcelona. Este antiguo pueblo de pescadores, casas blancas y pequeñas calles tranquilas ha evitado durante generaciones el turismo masivo para conservar su paz, lo cual lo hace muy especial y diferente entre los pueblos vecinos.
Sus cristalinas playas, nada aglomeradas son la mayor atracción, y en los últimos años también su oferta gastronómica tradicional con productos autóctonos, incluso contó durante muchos años con un restaurante de tres estrellas Michelín.
Hay que recorrer sus calles para admirar sus fachadas modernistas, indianas, de tradición marinera y noucentistas, sus plazas y sus pequeños comercios de toda la vida. No en vano, artistas, arquitectos, escritores y empresarios catalanes que celaban su privacidad, han escogieron Sant Pol durante años como sus residencias veraniegas.
El pueblo está muy bien comunicado por tren o carretera, con fácil acceso no solo a Barcelona ciudad, si no también a todo el Maresme y la Costa Brava. Esta condición, sumada a las características únicas de este pueblo entre sus vecinos, lo convierten en una excelente opción a la hora de invertir en una casa vacacional.
Es posible conseguir casas en primera línea de mar, chalets o villas familiares modernas o tradicionales en tranquilas zonas residenciales y con impresionantes vistas al Mediterráneo.
Sant Pol de Mar es una excelente opción si su prioridad es la tranquilidad y la privacidad que este encantador pueblo le ofrece, además del fácil acceso a Barcelona y al resto del la Costa Brava. Es el sitio ideal para encontrar esa casa de verano de sus sueños en la costa del Mediterráneo.
