TRANQUILIDAD Y CONFORT EN EL CAMPO
Éste antiguo batán del siglo XVIII donde se enfurtían los paños de las famosas mantas de Benamahoma y perfectamente restaurado con elementos de la época, se ha convertido en una coqueta Casa Rural.
La superficie es de 10.000 metros cuadrados y los dos edificios tienen 260 metros construidos.
En la planta alta, a la que accedemos desde el jardín, encontramos un amplio salón comedor con chimenea y techo artesonado, además de unas bonitas alacenas con vajillas y libros. La cocina con azulejos de una fábrica sevillana consta de todos los electrodomésticos y un mobiliario rústico, el mismo que predomina en toda la casa.
En la planta de abajo tenemos un pequeño jardín y los tres dormitorios con los baños en suite. Todos tienen una bonita y original decoración, armarios empotrados y TV.
El edificio tiene tejas árabes, muy propio de las construcciones de la zona y amplios ventanales, algunos de ellos dando al río Majaceite que bordea la casa.
La arboleda y los árboles frutales de los que consta y está rodeada la finca, son espectaculares; también nos encontramos tres manantiales por los que corre el agua que proviene de la sierra. Subiendo por una pequeña escalera de piedra llegamos a la alberca, de azulejos con agua procedente de uno de los manantiales y una bonita pérgola.
En la entrada de la finca tenemos otra pequeña casa con salón con chimenea, cocina y dos dormitorios con baño.
Ésta finca con aire mágico y una situación privilegiada, está situada en plena Sierra de Grazalema y pertenece al término de Benamahoma, lugar donde se recogen más litros por metro cuadrado de toda la península. Rodeada por el río Majaceite, muy caudaloso ya que concurren todas las aguas provenientes de la Sierra, y lleno de pequeños manantiales, la convierten en un lugar especial.
Gracias a eso se forma un microclima en la zona por lo que los manantiales, pozas, y avifauna la convierten en un paisaje nada típico de Andalucía la Baja, más parecido al del Norte o Galicia.
Benamoha, pertenece a la bonita ruta de los Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz por lo que su ubicación, no puede ser mejor. Cerca nos encontramos Grazalema, El Bosque, Ubrique, Arcos y el famoso circuito de Jerez de la Frontera y su aeropuerto,al que llegamos en 40 minutos con vuelos a numerosas ciudades españolas y europeas.
Se encuentra también a 1 hora y 20 minutos del aeropuerto de Sevilla y a 1 hora de la playa más cercana.
Muy adecuada para los amantes del senderismo, trekking y de la tranquilidad.
