En un maravilloso terreno de aproximadamente una hectárea y media se extiende un majestuoso cultivo de 320 olivos.
La tierra fértil y el clima propicio han permitido el cultivo de cuatro variedades selectas, Changlot Real, Arbequina, Picual y Koroneiki, cada una aportando sus características únicas al aceite producido. Cada temporada, este hermoso olivar rinde aproximadamente entre 7.000 y 11.000 kg. de aceitunas, produciendo una media de 1.200 a 1.500 litros de aceite en verdeo, reflejando el cuidado y el esmero con el que se manejan los olivos.
Poseyendo Almazara propia de última generación con todo lo necesario para la molienda de 10.000 Kg diarios, limpiadora de aceitunas, centrifuga vertical (limpieza del aceite, llenadora de garrafas, botellas, etc...)
Maquinaria, toda la necesaria para el cuidado de los olivos, fumigadora, podadoras, riego y abonadora automática, maquinaria para la recolección, picadora de hierba y poda de olivos.
Dos tractores de 97 y 22cv, una carretilla AUSA 150 con volteador para los cajones de aceitunas, 30 cajones de 400kg. de capacidad, una mini bobcat 175, y mucho más material.
El proyecto para este increíble terreno va más allá de la producción de aceite. En armonía con la naturaleza, se planea la construcción de una vivienda que se integre perfectamente en este paisaje sereno. El diseño contempla una casa que oscila entre los 250 y 700 metros cuadrados, ofreciendo un espacio que no solo cumple con las necesidades prácticas, sino que también se convierte en un refugio acogedor en medio de la belleza natural circundante.
La sostenibilidad es una prioridad en este proyecto, y es por eso que se incorporarán paneles solares con acumuladores para garantizar una fuente de energía limpia y renovable. Estos paneles no solo contribuirán al respeto del medio ambiente, sino que también ofrecerán una independencia energética que potenciará la autosuficiencia del lugar.
Además, cuenta con un aljibe y un pozo, que aprovechará al máximo los recursos hídricos disponibles. Este sistema de almacenamiento permitirá la gestión eficiente del agua, asegurando la sostenibilidad del riego automático que mantendrá los olivos en óptimas condiciones. La combinación de la tecnología moderna con la riqueza natural de este terreno crea un equilibrio perfecto entre la tradición y la innovación.
En este maravilloso terreno, la vida se desarrolla en armonía con la naturaleza. La producción de aceite de oliva se convierte en un arte, la construcción de la vivienda en una expresión de elegancia rural, y la implementación de tecnologías sostenibles en un compromiso con un futuro respetuoso con el medio ambiente.
Este lugar es más que un terreno con olivos, es un testimonio de cómo la belleza, la productividad y la sostenibilidad pueden coexistir en perfecta armonía.
