Para los amantes de la arquitectura tradicional de Lanzarote, esta es una de las propiedades más sublimes disponibles en la isla en la actualidad. Esta propiedad con carácter, que data del siglo XIX, era el equivalente a una mansión de campo en su apogeo y muchas de las características originales aún se conservan; Hay paredes de piedra de un metro de espesor, amplias ventanas, techos con vigas de madera, muchas paredes internas y externas de piedra natural local y grandes piedras angulares talladas. Inusualmente, este edificio tradicional está lleno de luz.
Hoy la propiedad consta de una finca principal original y 2 casas de huéspedes más nuevas e independientes. La superficie total construida es de 545 m2 y el terreno de la finca de 8500 m2 está completamente rodeado por altos muros de piedra natural para mayor practicidad y privacidad.
Un camino bordeado de palmeras conduce a una zona de aparcamiento pavimentada que incluye una cochera, dos garajes y un gran espacio de almacenamiento. Un camino conduce a la entrada principal donde hay un patio pavimentado con guijarros de lava, un horno antiguo tradicional, un pozo de agua y las vistas más espectaculares del amanecer sobre el océano.
Al entrar a la finca principal hay un vestíbulo espacioso y luminoso del que parten muchas de las otras habitaciones. El techo de doble altura da una sensación de grandeza de la vieja escuela. Hoy en día está amueblado como un gran estudio y comedor, aunque también podría ser una impresionante sala de estar. Este espacio da acceso a la mayoría de las otras habitaciones de la finca, incluido un acogedor salón con un maravilloso techo de madera, chimenea revestida de piedra de lava y purificador de agua tradicional de piedra, una gran cocina independiente, una despensa, 4 dormitorios y 3 baños. El dormitorio principal tiene baño en suite y su propia terraza privada.
El comedor conecta con la gran cocina, un amplio trastero y el cuarto dormitorio. Este dormitorio y dos de los otros comparten un moderno baño familiar.
Al frente de la finca hay un patio pavimentado rodeado de maravillosos jardines maduros.
Hay dos casas de huéspedes independientes más recientemente agregadas. El más grande tiene cocina y salón que originalmente era una bodega. Tiene 2 dormitorios, un baño, WC separado y una preciosa terraza cubierta con pérgola. Esta casa de huéspedes tiene una entrada cerrada. Fuera de los muros exteriores hay una segunda casa de huéspedes que requiere algunos toques finales. El dormitorio se ha completado, pero el baño, la cocina abierta y la zona de estar se han dejado al estilo y las necesidades del nuevo propietario. Cada una de las casas de huéspedes tiene aprox. 100m2.
En el lado sur de la finca hay una terraza cubierta de 18 m con acceso a la cocina, el lugar perfecto para celebrar reuniones de cualquier tipo. Con vistas al océano, Fuerteventura y las montañas de Ajache en la parte trasera que muestran las famosas puestas de sol de Lanzarote.
El resto de la finca se destina a jardines y al revestimiento de piedra volcánica triturada de fácil mantenimiento llamado picón.
Toda la propiedad está construida en una sola planta, lo que la hace accesible y perfecta para cualquier número de usos. Podría utilizarse como pequeña casa rural, centro de retiro, casa familiar numerosa o casa de vacaciones o como propiedad de inversión por su potencial de alquiler. Una visita es imprescindible.
