API DE FAMILIA les presenta una encantadora planta baja seminueva en la tranquila calle Guillem de Muntanyans, en el barrio del Siglo XX de Tarrasa, a un pasito de la rambla Egara y la Carretera Montcada, dos de las vías principales de la ciudad. A escasos minutos de la entrada de Tarrasa centro de la autopista, y a 5 minutos caminando de FGC.
Este sueño super bien conservado, cuenta con un amplio salón comedor unido a la cocina de más de 21m2 que brinda acceso a un espacioso patio de casi 50m2, perfecto para disfrutar de agradables momentos al aire libre.
Además, la vivienda cuenta con un fantástico baño con bañera y bidé y dos confortables habitaciones; las dos dobles y exteriores que dan a un cielo abierto amplio con lavadero de 6m2 donde están situadas la lavadora y la secadora.
Los acabados de la propiedad son de alta calidad; con carpintería de aluminio de doble acristalamiento que garantiza un óptimo aislamiento térmico y acústico.
También cuenta con calefacción por radiadores de gas natural y aire acondicionado con bomba de calor por conductos, proporcionando un ambiente confortable en cualquier época del año, y con suelo de parquet, que brinda elegancia y calidez a todos los espacios. Además, al tratarse de un edificio seminuevo, cuenta con placas solares en la comunidad de vecinos y acumulador de agua eléctrico alimentado por las mismas para mejorar la eficiencia energética de la propiedad.
Si te preocupa el aparcamiento, tranquilo, existe la posibilidad de alquilar (70€/mes) o comprar (14.000€) de forma opcional, una plaza de parking en finca cercana.
Esta planta baja seminueva es una oportunidad única para quienes buscan combinar el encanto de vivir como en una casita, con las comodidades de una vivienda moderna y funcional.
Empieza a soñar alto, y no pierdas la oportunidad de adquirir este maravilloso hogar donde vivir momentos felices. ¡Contáctame hoy mismo para más toda la información y concertar una visita antes de que se te escape!
LA SUERTE DE NUESTRA VIDA
"Yo sé que te quiero, aunque todo cambie. Porque mañana puede que estés en otra parte. Yo sé que te quiero, y no escucho a nadie. Aún tengo la suerte de poder besarte...". Con los ojos cerrados todavía pongo mi mano encima de la suya, devolviéndole la caricia. Con la otra mano me quito un auricular, le doy al pause, y paro mi canción favorita de esta play list. Pero no me importa pararla, respirar y darme cuenta de la magia del momento.
Estamos tirados en las hamacas, tomando el solecito de esta primavera casi recién estrenada, escuchando un milagroso silencio para estar en medio de la ciudad solo interrumpido por nuestra propia respiración.
Llevábamos varios días con lluvia, y aunque bendita sea la lluvia, y el día de sol de hoy nos está sabiendo a gloria.
Nuestro tesoro está todavía en el colegio, y aunque en un ratito este silencio será solo un vago recuerdo, todavía nos quedan unos minutos para disfrutar de él, y de nuestro Bloody Mary.
La verdad es que cada vez le salen mejor: ¡vaya descubrimiento que hemos hecho! Así no hay manera de ponerse con la operación bikini, pero es que disfrutamos tanto estos momentos acompañados de nuestro cóctel favorito, que vale la pena llevar tan felizmente esos kilitos de más.
Escucho el timbre, y es que miro el reloj, ¡y ya son las cinco y cuarto! ¡Ya está aquí! ¿Cómo ha pasado el tiempo tan rápido?
Me pongo lo primero que encuentro en el armario, y bajamos al mercado del centro a comprar la carne para la barbacoa que tenemos mañana en casa.
Tener un patio tan grande y soleado, en el que estar tan tranquilos y agustito, hace que seamos los eternos anfitriones de casi todas nuestras reuniones de familia y amigos.
En esta ocasión vamos a celebrar el cumple de nuestro tesoro, que ha invitado además a 6 o 7 amiguitos de su clase. Nos juntamos más de 20 mañana, la sonrisa de felicidad que va a tener durante toda la fiesta compensará to
