
Seguro que hemos oído hablar sobre la tasación de una vivienda, ¿pero debe hacerse siempre? ¿Es obligatorio? ¿Cuándo debemos tasar una vivienda?
Según Tinsa, la mayor plataforma independiente de valoración y gestión digital de datos inmobiliarios en Europa y Latinoamérica, disponer de la tasación oficial de una vivienda, realizada por una empresa especializada, es un valor añadido a la hora de vender o comprar una casa.
El banco necesita conocer el valor objetivo del inmueble y por ello pide una tasación oficial con finalidad hipotecaria, regulada por la normativa oficial del Banco de España, que garantice el valor de ese inmueble en un determinado momento.
La importancia de una buena tasación es crucial. Desde la red donpiso ensalzan que una correcta tasación para combatir los efectos de la inflación y no perder dinero en el proceso de venta. En este sentido, según el último informe de la compañía, la correcta tasación de una vivienda acelera su venta un 40% y aumenta el precio de cierre de la operación en un 10%.
“Una correcta tasación es fundamental, pues un piso puesto a la venta por encima de su valor de mercado no va a recibir interés por parte de la demanda”. “Lo único que se consigue sobrevalorando un activo es ‘quemarlo’ en los portales inmobiliarios. Como consecuencia, se acabará vendiendo mucho más tarde y por debajo de su valor. Además, y especialmente por la situación inflacionista y de encarecimiento en la que estamos, hacemos un flaco favor a nuestra economía y sociedad poniendo a la venta viviendas por encima de su precio real”, afirma Emiliano Bermúdez, subdirector general de donpiso.
¿Cuándo es necesaria una tasación de una vivienda?
La tasación es necesaria siempre que queramos saber el precio real y objetivo de un inmueble. Algunos de los casos más habituales son los siguientes, según idealista son:
- Cuando se va a pedir una nueva hipoteca.
- Cuando se va a solicitar una ampliación de hipoteca.
- En algunos casos de novación o subrogación de la hipoteca.
- Cuando se quiere usar una propiedad o inmueble como aval.
- En caso de embargo de la vivienda.
Cómo se realiza una tasación
Debe llevarse a cabo por empresas homologadas y supervisadas por el Banco de España e inscritas en un registro oficial.
ING aconseja que primero, el tasador, que puede ser un arquitecto o arquitecto técnico, visita el inmueble para medir todas las habitaciones y hacer fotografías. Realizan un informe donde se especifica aquellas condiciones y parámetros del mercado.
Factores que valora el tasador en una vivienda
Ubicación
Señala la ubicación exacta de la vivienda. Porque es distinta la valoración de una casa situada en una calle frente a un parque que pegada a una carretera con mucho tráfico.
Servicios
Debe incluir los servicios de la zona (escuelas, parques, centros médicos, hospitales, transporte público…).
Superficie y distribución
ING también reconoce que es importante a efectos de la tasación la superficie útil de la vivienda, el estado de conservación y las reformas que se han realizado.
Calidad de los materiales construcción
Da mayor valor e información para marcar el precio de la vivienda, pues cuanto mejor es la calidad de la construcción, mayor es el valor de la vivienda.
Situación del inmueble en el edificio
Esto es la orientación y la altura. Un piso alto se valora más que uno en planta baja, igual que un piso exterior y con mucha luz tiene mejor valoración que uno interior.
Antigüedad del inmueble
Otro dato a destacar, tanto de la vivienda como del edificio. Si la finca ha sido rehabilitada aumenta el valor de la vivienda.
¿Quién paga la tasación?
Como norma general, lo más habitual es que sea el comprador de la casa (el solicitante de la hipoteca) quien abone los gastos de la tasación.
¿Qué sucede si el banco no concede la hipoteca?
En el caso de que se tase la vivienda para pedir una hipoteca pero el banco no la concede, desde la web de API, dan a conocer que se entregará el original del informe de la tasación para que se pueda aprovechar en negociaciones con otro banco.
Esa segunda entidad estará obligada a aceptar la tasación siempre que no haya caducado (es decir, que no hayan pasado seis meses desde que se realizó el informe), por lo que no tendrás que pagar de nuevo por ella. Eso sí: que la nueva entidad acepte la tasación no significa necesariamente que esté de acuerdo con el valor indicado. Puede que quiera comprobarlo por sus propios medios.