Venta de casa en calle La Salut de 3 habitaciones con terraza y calefacción

Esta encantadora casa de pueblo se encuentra ubicada en el pintoresco casco antiguo de Altea, uno de los pueblos más bellos de la costa mediterránea. Desde el exterior, sus paredes blancas y su arquitectura tradicional capturan la esencia de una casa antigua, añadiendo un encanto único gracias a su majestuosa puerta de entrada del color rojo a la vibrante historia de la zona. Al entrar a la propiedad, le recibirá un espacioso y acogedor hall que se abre hacia varias salas de estar exquisitamente decoradas. Cada rincón está impregnado de un estilo que combina la elegancia contemporánea con la calidez de lo clásico, manteniendo la esencia histórica de la casa. La iluminación cuidadosamente seleccionada realza los detalles arquitectónicos, mientras que los muebles y accesorios han sido elegidos con esmero para proporcionar un ambiente acogedor y sofisticado. La planta principal alberga un amplio comedor, perfecto para cenas familiares o reuniones con amigos. La cocina, completamente equipada y con una despensa espaciosa, refleja un diseño clásico y funcional. Un aseo en esta planta garantiza comodidad y conveniencia. En las plantas superiores, tres dormitorios bellamente decorados ofrecen un refugio tranquilo. La distribución inteligente de los espacios asegura la privacidad, mientras que los dos baños, uno en cada planta, elegantemente diseñados, añaden comodidad a cada estancia y un toque de lujo a la vivienda. La joya de la corona de esta casa es la impresionante terraza solárium que se encuentra en la parte superior. Desde aquí, se pueden disfrutar de vistas panorámicas al mar que quitan el aliento, creando el entorno perfecto para momentos de relajación o entretenimiento. La presencia de una cocina de verano en la terraza proporciona la oportunidad de disfrutar de comidas al aire libre mientras se admiran las vistas. La orientación sur de la casa garantiza una generosa cantidad de luz natural durante todo el día, creando un ambiente cálido y acogedor. A tan solo 150 metros de distancia llegará a la playa donde podrá disfrutar de la brisa marina y el sonido relajante del mar. En resumen, esta casa de pueblo en el casco antiguo de Altea es una obra maestra que combina la autenticidad de una vivienda histórica con las comodidades modernas. Su ubicación, diseño y vistas hacen de ella un lugar excepcional para disfrutar de la vida mediterránea en todo su esplendor.