Vivienda de arquitectura ecológica ubicada en el casco antiguo de Muro con impresionantes vistas de la Sierra Tramontana.
La vivienda cuenta con 228 m2 construidos distribuidos en dos plantas y se ubica en una buena parcela de 480 m2, con dos buenos jardines a ambos lados de la casa, con orientaciones Norte y Sur.
El jardín norte ofrece unas vistas imponentes a la Sierra, y el jardín sur, muy agradable y amplio, incluye una bonita zona con piscina y solarium.
Se accede a la casa por una gran puerta de madera, que se abre a un hall de entrada, con aseo de cortesía, en el que encontramos una escalera central a través de la cual nos asomamos a una enorme ventana de doble altura que nos regala la impresionante vista del jardín norte y de la sierra.
La vivienda sigue las nuevas tendencias en arquitectura que buscan integrar los espacios interiores y exteriores para que la vida fluya entre ambos.
En este sentido, en la planta baja encontramos un gran espacio diáfano y muy luminoso, en el que se encuentran unidos salón, cocina y comedor, abiertos a los dos jardines mediante grandes ventanales.
La cocina cuenta con una magnifica isla central y está equipada con electrodomésticos de alta gama.
En el salón se incluye una original chimenea acristalada que se abre tanto al interior como al porche exterior.
En planta baja, anexo y comunicado con la construcción principal, se encuentra un precioso tercer dormitorio doble de gran altura de techos, con vestidor y baño en suite y acceso directo a la zona de piscina.
En la planta primera de la construcción principal encontramos dos grandes dormitorios dobles, con vestidor y baño en suite, y doble orientación Norte-Sur. Al norte, enormes ventanales con vistas de la montaña, al sur con grandes ventanas y un bonito y amplio balcón en cada uno, con agradables vistas incluso a la cúpula de la iglesia del pueblo.
Los baños en esta planta tienen abiertos lucernarios acristalados en el techo, de manera que potencian la sensación de toda la vivienda de estar en contacto con el paisaje natural, imbuyendo a sus habitantes de calma y bienestar.
El proyecto enfatiza la sensibilidad ecológica, siguiendo parámetros de construcción sostenible: uso de materiales naturales de la isla, eficiencia energética a través de la climatización por aerotermia, aislamiento de la humedad y las temperaturas mediante bloques de cáñamo totalmente orgánicos.
El pueblo está localizado a 10 km de la playa de Muro (10 minutos en coche), elegida en 2022 por Traveler´s Choice como una de las 25 playas más bonitas del mundo. La playa está protegida por el precioso Parque Natural de S´Albufera, que permite diferentes paseos, en un entorno que cuenta con la mayor biodiversidad de la isla.
