Casa "típica gallega" del año 1880, ubicada en pleno corazón del Salnés concretamente en Paradela de Lores, del término municipal de Meaño, a escasos metros de la conocida ruta de los molinos de Lores-Simes.
Consta de excelente comunicación a través de autovía o carreteras comarcales, con los ayuntamientos limítrofes como son Sanxenxo, del cual está a menos de 5 km (escasos 5 minutos), O Grove (15 km), Cambados (12 km), etc. Tiene tiendas de alimentación, centro de salud, servicios municipales a escaso kilómetro y medio, además se ubica a menos de 2 kilómetros del polígono industrial de Nantes, donde se han instalado grandes superficies como Mercadona.
En parcela de unos 2.200 m2 aprox., antiguamente estaba destinada prácticamente en su totalidad a cultivo de vino, conservando actualmente solo las parras de vino tinto y las estructuras de las antiguas parras de vino albariño.
Vivienda del año 1880, que aúna el encanto de las viviendas de antaño, con todas las comodidades que exigen los nuevos tiempos.
Propiedad con acceso rodado (garaje para un coche), o acceso peatonal por cancilla restaurada.
Patio interior custodiado por enorme buganvilla y con una imponente vista a la piedra y la madera que conviven en la fachada de la planta baja de la casa, donde se ubica un generoso porche, que da acceso al lugar donde se ubicaban las antiguas cuadras, y que actualmente están acondicionadas como salón - comedor de verano y otro espacio sin fin asociado, donde se ubicaba la antigua bodega de la casa.
Acceso a la parte alta por escalera empedrada, donde se ubica la vivienda principal rodeada por zonas ajardinadas, un imponente hórreo y lavadero.
La vivienda se distribuye en hall de entrada, cocina típica gallega, en la que se conserva en perfecto estado "la lareira", una estufa calefactora de leña y al mismo tiempo equipada con los electrodomésticos que nos facilitan la vida actualmente.
Esta tiene acceso a la zona de comedor, espacio ubicado en la zona centro de la vivienda, desde la cual se acceden a las otras dependencias, como al salón.
Dispone de 4 dormitorios, uno de ellos en suite con baño en su interior y otro baño completo que da servicio a la vivienda.
Consta además de dos galerías, una grande a la cual se accede desde el salón, con cuatro ventanales y con la posibilidad de acristalarla por completo para dar más estética al espacio, y otra más pequeña a la cual se accede desde uno de los dormitorios, y cuya función ideal es la de convertirla en vestidor.
Techos altos con vigas de madera a vista, contras en las ventanas, paredes interiores de piedra, suelos de madera y alicatados rústicos, señas del estilo de antaño, que dan personalidad a la propiedad y la convierten en un reclamo exclusivo para sibaritas de lo rústico.
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