No ye lo mismo, y perdón por el asturianismo, tener un mirador en cualquier parte, que tener un mirador en la parte más alta y más acomodada de Somió. Porque si hablamos de la joya más preciada de todo el Norte, y que nos perdonen nuestros vecinos a ambos lados del territorio, hablamos únicamente de Gijón. El crecimiento de esta, permítanme, gran ciudad, está siendo vigoroso y no tiene freno ya. Y es posiblemente una de las noticias más esperadas de los últimos años, ya que Asturias sin Gijón sería inimaginable. La llegada del Ave aún aporta más garantías de crecimiento, pero lejos de todo este contexto, está la maravillosa calidad de vida que se respira en esta urbe de la costa cantábrica, cada vez más soleada y templada para disfrute de este noble pueblo de carácter amable y lleno de riquezas.
Al haber mencionado Somió entendemos lo que se puede llamar la 'Milla de Oro' de Gijón, ya que puede que sea la zona de mayor valor, aunque no por ello todas las propiedades que aquí encontramos cuentan con las mismas ventajas.
Y es que este chalet independiente ubicado en el Camino de la Cuesta de los Perros, tan solo estamos a unos minutos del centro y con todos los transportes públicos a un paso. Contamos aquí con 383 m2 construidos, con un chalet de dos plantas y un apartamento separado a una altura inferior ideal para invitar a familiares y amigos dándoles el mejor espacio y la mayor privacidad. Todo esto coge aún mejor forma cuando completamos el chalet con una zona acristalada lista para las mejores reuniones o como el ideal gimnasio con el que pretendes mantenerse en forma disfrutando de las mejores vistas.
Pero a esto le vamos a dar una vuelta más, añadiendo una zona ajardinada de estilo balinés, con el mirador con barandilla de cristal más afortunado de la zona, pues vemos Gijón, la playa, el horizonte y todo el paisaje que alcanza la vista. Además, el jardín que rodea la casa está mantenido con gusto, y tenemos diversas zonas de descanso en todas direcciones.
A la casa se accede subiendo una cómoda escalera de baldosa con detalles a los lados, donde destacamos también un par de fuentes, figuras de piedra, y vegetación que aportan aún más buenas vibraciones a la entrada y que acaban arriba con una mesa con sillas y sombrilla, que se acaba convirtiendo en uno de los mejores lugares para buscar un poco de sombra cuando.
