Casa de pueblo tradicional para restaurar en Palmeira (Ribeira) de 170 m2 con tres alturas (Bajo, Primera y Bajo Cubierta), planta de 65m2 y patio interior. Superficie de la parcela 104 m2.
Dispone de patio y terraza interior de unos 26 m2 con un pozo de agua natural y área de barbacoa, lo que resulta una zona chill-out ideal donde disfrutar del aire libre, en una zona exterior pero también privada. El patio interior ofrece múltiples posibilidades, como sería transformarse en zona verde-jardín.
Tanto desde la terraza trasera de la casa como desde su coqueto y espectacular balcón, ofrece unas cautivadoras vistas a la playa de la Corna y a la cordillera del Barbanza.
Ubicación fantástica en una de las calles empedradas más bonitas del pueblo y junto a la bonita iglesia parroquial.
Distribución:
Dispone de 5 habitaciones, 2 baños, cocina, zona de patio-jardín con terraza trasera y barbacoa. El salón comedor (en el nivel bajo cubierta) dispone de un gran balcón con vistas al mar.
Se permite la posibilidad de ampliar su superficie mediante la construcción de un nivel más de altura para poder mejorar las, ya de por sí preciosas vistas de las que dispone.
En cualquier caso el potencial que ofrece la casa, con su balcón, terraza y patio trasero resulta idílico, un verdadero mirador al mar, lleno de carácter y autenticidad.
Que ENCONTRARAS en la localidad de Palmeira (Ribeira):
Situada en pleno corazón de la Ría de Arousa, un paraíso lleno de personalidad dentro de la costa Atlántica Gallega.
A tan sólo 5 minutos caminando entre pintorescas callejuelas del pueblo marinero de Palmeira (Ribeira, Comarca del Barbanza, A Coruña), se podrá disfrutar de una de esas playas gallegas llenas de encanto y escasamente conocida por los no locales.
Cambiando ligeramente de dirección, e igualmente tras un hechizante y corto paseo salpicado de inesperados balcones marítimos, plazas empedradas y viviendas llenas de historia y leyendas, se ubica el pequeño y pintoresco puerto marinero.
Allí será difícil elegir si continuar el paseo por orillamar, o bien sentarse, calmadamente, a disfrutar de una verdadera gastronomía gallega tradicional en algunos de los bares y restaurantes que abundan a lo largo del paseo portuario.
Lugar inspirador, donde la tranquilidad y el silencio se rompe con el batir de las olas, las gaviotas, y de vez en cuando, con el sonido de la sirena de un barco llegando a puerto, recibido por el cantar de las gaviotas, que anuncia el final de una nueva jornada. Es entonces cuando surge la gran oportunidad de degustar los frutos del mar en su mayor nivel de frescura, en cualquiera de los pintorescos restaurantes y bares situados a lo largo de paseo porturario.
Localidad bien comunicada, equilibra en perfecta armonía una ubicación "escondida" con un cómodo y fácil acceso por vía rápida y autopista a las grandes ciudades gallegas: Santiago de Compostela (35 min), Vigo y Pontevedra (1 hora).
No. No es un lugar para cualquiera.
Sólo para aquellos que entienden la grandeza de vivir en "sitios pequeños" al lado del mar.
Llámanos para venir a verla y no perderte esta gran oportunidad!
