Lucas Fox presenta esta clásica villa construida en 1982, cuya distribución diferencia perfectamente las notables áreas de recepción, la vivienda y la zona de servicio.
Esta villa independiente es ideal para quienes busquen disfrutar en familia de un entorno natural, seguro, con espacios verdes, terrazas, piscina, pista multideporte y una zona de barbacoa durante todo el año. Además se sitúa junto al Club de Golf de Madrid, en una de las mejores urbanizaciones de Las Rozas, a menos de 30 minutos de Madrid.
Al entrar en la parcela, podemos apreciar la inclinación del terreno. Tras recorrer unas escaleras, encontraremos la casa en la parte alta de la parcela. El importante porche de recepción principal nos conduce al impactante vestíbulo a doble altura y con una magnífica escalera que hace de punto de unión con las diferentes áreas. Hacia la izquierda, encontramos un despacho de muy buenas dimensiones, con vistas y salida a la terraza y al jardín. Unas puertas dobles nos llevan a un muy amplio salón con dos ambientes con una bonita chimenea y vistas y salida a las terrazas este y sur. Desde el salón, llegaremos hacia el comedor muy luminoso por su ventana al sur y con doble conexión con la cocina. Esta última presenta una planta cuadrada y muy amplia y con salida al jardín, además de contar con una entrada de servicio, ideal para acceder desde el garaje. Desde la cocina podemos volver al vestíbulo y un pasillo nos llevará al aseo de cortesía, seguidamente un dormitorio de huéspedes con su baño privado y luego por el mismo pasillo a un dormitorio extra que podría ser de servicio con otra estancia que puede utilizarse como cuarto de lavado.
Nuevamente en el vestíbulo, la magnífica escalera de madera nos llevará a la planta superior donde originalmente había cuatro dormitorios, pero uno de ellos ha sido abierto para dejarlo como un salón de reuniones y televisión con balcón al vestíbulo y doble altura. En esta planta, actualmente se dispone el dormitorio principal con vestidor y baño privado y otros dos dormitorios y un baño que da servicio a estos últimos.
En la planta semisótano, se ha aprovechado para configurar numerosas estancias y espacios, algunos ideales para reuniones familiares, como la amplia bodega. Aquí también encontraremos la sala de máquinas y herramientas y gracias a la inclinación de la parcela, llegamos al nivel del garaje.Volviendo hacia la zona de recepción, cualquiera de las cristaleras nos conduce a un bonito jardín privado, con piscina con buena orientación al sol, un área techada que da servicio a la piscina e incluye una barra de bar, vestuario y un aseo. Sobre la parte de atrás de la parcela, hay una zona de huerta y una antigua pista de pádel o multideporte.
La vivienda necesitaría una reforma que aproveche la magnífica estructura y diseño original para disfrutar de vivir en una ubicación céntrica, pero a la vez muy privada, con una gran parcela y con un mantenimiento muy sencillo.
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