Venta de casa en Salinas de 5 habitaciones con terraza y jardín

En primer lugar, nos gustaría destacar la ubicación y el diseño, ya que originalmente era una aldea muy pequeña de seis propiedades, todas de la misma familia. El caserío tiene muy buenos accesos y magníficas vistas. Se encuentra a cinco minutos en coche de la ciudad de Salinas y aproximadamente a ocho minutos de Sax. La propiedad se encuentra en medio de tres grandes casas construidas en piedra, aunque he de destacar que sería casi imposible escuchar a los vecinos debido al grosor extremo de las paredes. Al entrar, hay un bonito recibidor y a su vez podemos observar la amplitud de la casa.  A su izquierda hay un gran salón con una impresionante chimenea de leña en un extremo y a su derecha hay un comedor igualmente impresionante. De frente hay un arco a una cocina/comedor muy grande. El área de la cocina tiene forma de L y al fondo encontrmos una despensa. También hay un dormitorio doble y un baño en la planta baja, lo que es genial si alguien no puede subir escaleras, ya que lo tienes todo. Desde la cocina/comedor puede salir a la parte trasera, que es un enorme patio amurallado con dependencias para almacenamiento o para un taller. Al fondo hay un acceso directo al terreno donde se encuentra una balsa. Si subimos a la planta superior,  hay un bonito y amplio rellano con mucho espacio para un sofá y un par de estanterías (perfecto para hacer una sala de estar), es un área en la que podría imaginar pasar mucho tiempo en verano ya que el interior de la propiedad se mantiene tan fresco que la familia ni siquiera ha considerado aire acondicionado necesario. Hay cuatro habitaciones y un baño familiar. Además, tres de los dormitorios tienen una alcoba que se utiliza como vestidor, pero podrían convertirse fácilmente en cuartos de ducha para hacer baños en suite. Es una vivienda muy luminosa, sobretodo la planta superior. El terreno cuenta con casi 20.000 m2 de tierra cultivable con olivos y almendros. El terreno alrededor de las parcelas está protegido y, por lo tanto, no puede haber ninguna construcción que estropee ninguna de las vistas.