Esta impresionante villa se encuentra estratégicamente ubicada en uno de los pulmones verdes de la Costa Brava, en la reserva natural de Masis de Caldiretas. La vivienda se sitúa en la apacible urbanización de Sant Grau, bautizada en honor a la ermita de Sant Grau, una zona especialmente apreciada por ciclistas. Se ofrece mucha privacidad y la tranquilidad en un entorno natural con vistas asombrosas.
La casa, construida en la década de 1970, se ha ido actualizando para cumplir una función dual: una parte de la vivienda sirve como residencia principal, mientras que la otra se destina como un hotel de tres estrellas.
En la planta superior, la que se destina a vivienda, se encuentra un elegante vestíbulo, una sala de estar con chimenea, un comedor y una cocina. La zona de descanso consta de tres dormitorios, cada uno con su propio baño equipado con ducha. Todas estancias principales ofrecen vistas impresionantes del paisaje con pinos y el mar. En este mismo nivel, se encuentra una zona de solárium, una cocina de verano y un comedor al aire libre perfecto para días soleados.
La planta inferior, dedicada a los huéspedes, es completamente autónoma, con su propia cocina, sala de estar y una zona de barbacoa. Aquí se distribuyen cuatro dormitorios, cada uno con su propio baño, y uno de ellos con acceso a una terraza y jardín. Además, esta planta cuenta con una pequeña cocina, un acogedor salón y vistas preciosas. Aunque ambos niveles están conectados internamente, los huéspedes disponen de una entrada independiente.
Propiedad dispone de 4 plazas de parking exteriores y otras cuatro dentro de garaje. Todas las plazas cuentan con camaras de vigilancia.
Como colofón, la casa cuenta con dos piscinas, una para adultos y otra para niños.
Aunque la propiedad se presenta en buen estado, algunas mejoras podrían llevarla a su máximo esplendor.
