Este precioso piso situado en la quinta planta con ascensor, de una típica finca de Barcelona, construida en 1930. Con un precioso vestíbulo de entrada y un ascensor nuevo, se mantiene intacto el encanto característico de una finca de casi 100 años antigüedad.
Solo entrar, nos damos cuenta de que éste es uno de esos inmuebles que te enamoran al instante, un auténtico bombón. No sólo porque esté completamente reformado y con mucho gusto, hace sólo un par de años, sino por lo realmente importante no se puede cambiar, ni conseguir.. . Zona tranquilísima, finca con pocos vecinos, piso en planta alta, mucha luz natural y orientación ideal, vistas, totalmente exterior y ventilación cruzada.. . Un piso en el centro de Barcelona que te hace sentir en calma, te hace sentir en casa.
Cuando entramos nos encontramos con un espacio abierto y luminoso que te invita a ir hacia una de las zonas más acogedoras de toda la casa, la sala de estar/comedor, y la salida al balcón lleno de luz natural y mucho suelo, que nos aporta ese punto de vitalidad y energía positiva que todos necesitamos.
Junto al comedor, hay una habitación individual muy luminosa y con vistas a la calle Legalidad. Al otro lado de la sala de estar y comunicado con un pasa platos súper práctico, encontramos la cocina, una cocina cuidada y reformada al detalle que lo tiene todo, incluso una pequeña habitación/armario que sirve de despensa, zona de lavado y trastero, muy práctico.
Cuando nos dirigimos hacia el fondo del piso, nos damos cuenta de que la sensación de espacio, de calidez y de luz natural siguen muy presentes, primero en el baño completo, exterior y muy bien reformado con un estilo atemporal y muy bonito, y por último, aislada en el otro extremo del piso, la habitación principal, una gran habitación muy luminosa, con salida a otro balcón y vistas al tranquilísimo patio interior de manzana.
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